Mi nuevo mundo

Quizá debería escribir el título como “el cambio de mundo”. Explico:

En el pasado, era muy dado de gritar a los 4 vientos cuando algo bueno me pasaba en mi vida sentimental, puesto que para mí, es un suceso de suma importancia que me llena de alegría. Algunas veces me llegaron a decir que no lo pregonara tanto, porque si las cosas salían mal, el que iba a quedar como tonto iba a ser solamente yo. Además, en mi casa, por más que digan que me apoyan y demás, la verdad es que mi madre y mi hermana la chica siempre han sido muy celosas. Aunado a eso, el hoyo en el que caí cuando mi primera novia me terminó fue profundo, porque me dolió más allá del alma, y tardé mucho, mucho tiempo en salir de ahí. Creo que hasta aquí se puede decir que todo es, de cierta forma, “normal”.

Quizá por las razones anteriores, quizá por otras que ni yo mismo sé, como que me hice un poco más reservado en ese sentido. Nunca he negado cuando tengo pareja, pero tampoco he sido muy dado a gritarlo para que todo mundo se dé cuenta. Podría decir que ha sido parte de mi crecimiento como persona, aunque no sé si sea bueno o malo. Pero algo que sí quedó muy marcado dentro de mí fue el miedo a que, cuando las cosas parecen estar saliendo de lo mejor, todo pueda terminar de repente. Sí, tengo miedo, mucho miedo a la traición.

Mis amigos me ayudaron mucho, pero hay otros que, queriéndome ayudar, me hundían todavía más. Recuerdo que cuando por fin me conseguí a aquella primera novia (fue una espera de muchos meses), platiqué con alguien que todavía en estos momentos es mi amiga, pero sus palabras jamás se me van a olvidar: “Recuerda que todo lo que comienza, tiene que terminar”. ¿Lógicas? Sí, ciertamente. ¿Alentadoras? Para nada. ¿De qué sirve pensar en el fin cuando algo apenas está comenzando? Y aunque no estuviera comenzando, es demasiado trágico pensar en que todo va a salir mal. Simplemente no es sano. Es mejor vivir el momento y ver cómo se van dando las cosas. La probabilidad de que todo salga bien también existe, y a ésa es a la que le quiero apostar.

Mi vida sentimental estuvo apagada por mucho tiempo y porque yo así lo quise. Todos los recuerdos amargos me venían a la cabeza, todo me hacía pensar que cualquier persona era mejor que yo, que cualquier chica que estuviera conmigo se enfadaría al primer momento, y aunque en una relación siempre lo doy todo (nunca me quedo con ganas o reserva de hacer algo), siempre me queda la idea de que no tenía nada que ofrecer realmente. Incluso ahora todavía hay ratos en que así lo pienso.

Hoy estoy tranquilo, y quiero, más que pregonar, compartir con la gente que lee lo que escribo en este blog (la mayoría de las veces sin sentido), el hecho de que, desde el viernes pasado, alguien aceptó caminar a mi lado. Ignoro qué pasará; no quiero pensar en el futuro. Simplemente quiero que las cosas se den, que pase lo que tenga que pasar, y quiero esforzarme en todo, tanto por mí, como por ella.

Necesito estabilidad en este sentido, y espero por fin encontrarla.

Un rato de inspiración

No lo pensé hoy. Lo pensé en el momento en el que quise decirlo. Sabía que leer “Piedra de sol” me daría buenas ideas.

“Delante de nosotros se han abierto las puertas hacia un nuevo mundo. Ahí dentro, las cosas no serán fáciles. Habrá muchos obstáculos, pero estando juntos todo es posible. Ahí dentro, podemos construir nuestro mundo. Ahí dentro, podrás saber todo de mí, lo bueno y lo malo, así como yo también podré saberlo todo de ti. Es un mundo difícil pero a la vez maravilloso, al que no se puede entrar solo. Ahora solo falta que tú decidas: Hemos abierto las puertas. ¿Entrarás conmigo?”

Misma dedicatoria que el anterior. Decidí ponerlo esta vez en español.

Para alguien que se ha convertido en la fuente de mi inspiración.

De regreso a la rutina.

Oficialmente mañana regreso a mi trabajo como profesor de inglés en las escuelas primarias, y siento que ya estoy agotado desde la noche anterior. Realmente no cuesta tanto levantarse a las 7 am todos los días, lo que realmente pesa es estar con los niños, y hasta eso tampoco es tanto. Me refiero en especial a los niños “problema”.

Si yo tengo a cada grupo solo 1 hora por semana y termino el día exhausto, mis respetos para los maestros, que los tienen que aguantar prácticamente todo el día todos los días. En Japón, los niños de las escuelas primarias entran a clases a las 8 am y salen por lo general después de las 4 pm, por si alguien se quejaba de que eran muchas horas de escuela en México. Como sea, los maestros en general tienen todo mi respeto, porque se necesita verdadera vocación para dedicarse a la enseñanza, y más cuando se trata de niños de secundaria.

Entre lo poco malo que hay al estar con los niños, hay muchas cosas buenas. Los niños son sinceros, quieren jugar, tienen curiosidad por todo, y en cierta forma los envidio, porque un niño solo tiene que preocuparse por ir a la escuela, salir de ella y jugar (son pocos los que realmente hacen la tarea). Gracias a ellos, he aprendido a ser mucho más paciente (cuando llegué a Japón no soportaba tener a un niño cerca) y al mismo tiempo a conocerme más. Es algo así como un “extra” que no me esperaba que tendría por esta parte del mundo.

Lo mejor del caso es que las clases de septiembre son solo esta semana debido a los eventos deportivos que se realizan en las escuelas con motivo de la llegada del otoño. Así que después de esta semana tendré 3 semanas libres de niños otra vez. La verdadera friega comienza en octubre… Ahí sí ya tengo agenda llena.

Y entre otras cosas

Hoy que estaba leyendo el informador, me encontré con una nota sobre el nuevo álbum de Maná, y aunque no la leí completa, recordé que a estos monos los he tenido frente a frente antes. Fue en el aeropuerto de Los

25 minutos

No había querido tocar el tema aquí porque sinceramente creo que no hay mucho que explicar, pero faltan menos de 2 semanas para mi presentación en Tokyo, y obviamente sigue sin gustarme.

Como sea, esta semana recibí un buen empujón, y parece que recibiré otro muy grande el sábado, y al menos ya tengo el valor de afrontar lo que venga. Seguro regresaré llorando, pero ni modo.

La primera vez que practiqué hice 33 minutos. Demasiado. El límite es 25 minutos y es precisamente al que quiero llegar. Realmente en el reglamento dice que la presentación puede ser de 20 a 25 minutos, y el resto del tiempo que te dan (media hora) es para preguntas. Sinceramente, quiero quemar todo el tiempo que pueda para que queden solo 5 minutos de preguntas. No debería estar nervioso, ya me pasó en el examen final de maestría, pero de todas formas es un ambiente nuevo, con gente realmente especializada en el área… No sé qué vayan a decirme o preguntarme, pero bueno, tengo que prepararme.

Lo que me estoy temiendo es que por andar en la lela ya no alcance boleto de avión para esa fecha. Se preguntarán ustedes si no hay muchos vuelos para Tokyo, pero no es eso, sino que por lo general los vuelos que salen por la mañana están repletos desde meses antes debido a que la gente de negocios así trabaja: Viven en un lugar, se van en avión a otro y regresan el mismo día por la noche (claro, todo pagado por la empresa). En el caso extremo de que se necesite hotel, generalmente son de buena calidad en los que se quedan, pero esto es solamente cuando el negocio es realmente muy importante o cuando por causas naturales (clima, terremotos) no pueden regresar el mismo día. Obvio que todo esto lo pagan las empresas, y no andan como otras comprando casa en cierto lugar para hacer un Big Brother de los trabajadores que van a cumplir con su deber,,, ¡Oh Dios! ¿De quién estaré hablando?

Como sea, hoy fui a ver lo del avión y resulta que estaba cerrado. Ni modo. Voy mañana en la mañana a ver si consigo algo. Si no, queda la opción de irme un día antes, pero no quiero pagar 2 noches de hotel en Tokyo. Tengo amigos por allá, es cierto, pero sé cómo son los departamentos ahí y no quiero causar molestias. Ya veremos que sucede.

25 minutos… parecen una eternidad.

Un objeto muy especial


El nombre de esta lindura es Ema. ¿Por qué ese nombre? Simboliza una unión muy especial, que pinta para florecer mejor.
Ema no está en mi casa, ni en mi laboratorio. Ema está con quien tiene que estar. Fue creada para estar ahí, y para que nosotros la encontráramos.

En el mar la vida es más sabrosa



Sé que el título está más choteado que nada.

No se puede decir que se estuvo de vacaciones de verano si al menos no se va una vez a la playa (he ido 5 veces en menos de un mes). El jueves pasado agarré mis cosas y me fui, obviamente solo, a una playa a la que tenía ganas de ir y no había podido por falta de tiempo. El lugar se llama Keya, y aunque está dentro de la prefectura de Fukuoka, ir hasta allá desde Iizuka toma aproximadamente 2 horas en carro, y eso que usé el highway para evitarme el tráfico de la ciudad, si no, fácilmente hubieran sido 3.

El lugar es pequeño, pero muy bonito. Casi no había gente. Me la pasé muy bien asoléandome y nadando.

Nutrición



Todo estudiante debe tener siempre en mente que alimentarse bien es la mejor manera de prepararse para un arduo día de estudio, y qué mejor que comida que contenga alta cantidad de nutrientes y, sobre todo, que te llene el estómago lo suficiente porque es muy probable que sea la única comida del día debido a las múltiples ocupaciones que se suelen tener cuando se es universitario.

Un pedazo de pizza y refresco, comprados en Costco.

El inglés para los asiáticos: Una tarea titánica

Hablando 3 idiomas fluidamente y entendiendo algunos otros, entre ellos lenguajes orientales, comprendo la dificultad que representa para los asiáticos aprender inglés. Aclaro que no puedo generalizar diciendo TODOS los asiáticos, porque hay idiomas de los que no tengo ni el más mínimo conocimiento, y también hay lugares como Cambodia, en donde la gente estudia francés, por lo que el “salto” al inglés no es tan pesado.

Aunque se lo excuso a las personas comunes, a las que no tienen necesidad de hablar más que su idioma natal, no puedo dejar de admirarme de las empresas y de los gobiernos en general por la mala calidad de las traducciones al inglés que suelen hacer. Todavía en juguetes o productos así está en la línea de decirles que no inventen, pero en señalamientos que se suponen que están en inglés para ayudar a los extranjeros, ahí sí de plano se pasan de lanza.

Sitios como Engrish.com, y, en menor medida, el gran blog de Pinches Chinos presentan evidencias de lo aquí comentado. Algunas veces uno no puede evitar reírse al leer lo que quisieron escribir. Entendiendo kanji, los “hanzi” (las letras chinas) también se vuelven entendibles hasta cierto punto y es posible entender el significado de algo escrito en chino aun cuando no se tenga ni la más mínima idea de cómo se lee. Uno lee el mensaje original y no es nada del otro mundo, pero las traducciones de plano le sacan una risa a cualquiera que entienda correctamente aunque sea un poco de inglés. Para muestra, basta un botón:



(foto tomada del blog de Pinches Chinos)

En lo poco que sé de chino y guiándome por el significado de los kanji que conozco del japonés, lo que más o menos quieren decir en la parte superior del letrero es: “Si tiene intención de cooperar, llévese consigo su basura” (traducción muy dudosa, pero al menos se comprende). Basta ver la traducción que le pusieron en inglés para reírse un poco.

¿Por qué sucede esto? Por la gran diferencia que existe entre el inglés (y podemos mencionar también a las lenguas romances) y los idiomas asiáticos. Pero, ¿cuál es la diferencia? La gramática claro que tiene mucho que ver, pero **el contexto** es lo que marca la diferencia. Explico:

En español, el sujeto de una oración puede ser omitido una vez que emisor y receptor están situados en el contexto; no obstante, sigue estando presente en las oraciones bimembres gracias a la conjugación de los verbos, con la cual podemos saber quién es el sujeto aunque no esté siendo nombrado directamente (lo que se conoce como sujeto tácito o morfológico). Lo mismo sucede con los objetos directos, ya que pueden ser sustituidos por pronombres para evitar la repetición de la misma palabra, como en el ejemplo:

A: Ese libro que estás leyendo, ¿es caro?
B: No realmente.
A: ¿Dónde **lo** compraste?

En inglés, el sujeto no se omite, pero la sustitución de objetos como en español también existe.

Sin embargo, y hablando específicamente del japonés, hay que poner muchísima atención en cada enunciado, porque una vez que emisor y receptor están dentro del contexto, algo que ya ha sido nombrado una vez no vuelve a ser nombrado (a menos de que uno así lo requiera). Incluso, hay veces en los que un solo verbo hace las veces de una oración completa, como en el siguiente ejemplo:

A: 作

¿Idiotez, falta de tiempo o falta de ganas?

Me preocupo… Tengo meses sin prender el PS2. Quiero terminar Kingdom Hearts II y tengo una montaña de juegos por terminar, pero sencillamente no encuentro fuerzas para sentarme a disfrutar uno de mi pasatiempos favoritos, y para que eso suceda es que realmente estoy mal.

Por supuesto que estoy jugando con el PSP, pero generalmente es mientras estoy fuera de casa, y solo me concentro en Tekken 5… ¿pero que pasó con mi amor por los RPG?

Tengo que arreglar el desorden de mi cuarto… A lo mejor si lo veo limpio (JOJOJO) me vuelven a dar ganas de jugar.

¡Ah! Y para los que se preguntaban qué onda, sí, por fin leí el principito. Me duró dos días el libro, pero ya quedó tachado de la lista. Un poco más y podré morir en paz, jejeje.