Es bien sabido por todos que a mediada que vas creciendo las responsabilidades aumentan y el tiempo libre disminuye. Lo malo es que esta disminución generalmente no es proporcional al aumento.
Ayer comenzó el Open Campus 2006. Para quienes no estén familiarizados con el término, se refiere al periodo en el que las universidades japoneses abren las puertas a todo el público, en especial a las preparatorias, para que conozcan tanto sus instalaciones, lo que se estudia y lo que se está investigando. Desde que llegué a este lugar, he sido el encargado de explicarle lo que es la traducción máquina a los estudiantes de preparatoria que llegan a nuestro laboratorio.
Aunque solo son dos días, uno termina cansado de tanto hablar, puesto que se explica lo mismo una y otra y otra y otra vez. El horario es 10:30-12:30 y 13:30-14:30, y solo es dos días, por lo que en teoría la tarde queda libre… Eso fue lo que pensé.
Me preparé ayer para irme a la playa justo en cuanto terminara el Open Campus, pero tenía que terminar unos trámites con mi profesor sobre el artículo que iré a exponer a Tokyo el próximo septiembre… eso me tomó hasta poco después de las 6 pm… Mi ida a la playa se esfumó en un instante.
Hoy planeo ir, pero mucho me estoy temiendo que no podré por lo mismo. Si todo sale bien, todo lo del artículo lo envío mañana miércoles, pero ya pido a gritos un poco de descanso. Estoy demasiado estresado.