A mis padres, que bien o mal se partieron la cara para que yo pudiera estar en donde estoy.
A aquellos que alguna vez me desanimaron y nunca creyeron que podría llegar a donde estoy.
A todas las mujeres que alguna vez fueron especiales en mi vida.
Pero sobre todo:
A todos los que me hacen ver que todavía no he logrado mucho.
A todos los que me siguen regañando, dándome consejos y apoyándome por seguir adelante.
A todos los que creen en mí de alguna u otra manera.
A aquellos que me honran al tomarme de ejemplo, cuando realmente no he hecho mucho con mi vida.
Para todos ustedes, en mi cumpleaños 27, el tercero que paso fuera de México: ¡Muchas gracias!