He pasado unos días terribles y todo gracias al caso CTC40S: “Chino Tosiendo Cada 40 Segundos”. Sinceramente, no sé qué es lo que mueve a este sujeto, puesto que no hacer nada que no sea para su santo.
Hace un tiempo le envié por correo una petición: Si ya tiene desde el año pasado con la tos, y hay días en que es muy frecuente, entonces, ¿por qué no ir al médico? Se lo pedí de favor; le dije que era difícil concentrarse a veces porque siempre estaba tosiendo, todo de muy buena gana. Pensé que funcionaría… pero ¡oh, qué equivocado estaba! La tos ha seguido, y ha llegado al punto de desquiciarme.
Opté por tirarle una indirecta: Antes de llegar al laboratorio siempre compro 喉飴 (Nodo ame, algo así como las Halls en México), y cada que comienza a toser le ofrezco una. Pero parece que no entendió, porque seguía y seguía con su “concierto”.
De plano estos últimos días me dolía el estómago solo de ternerlo al lado, y cada que tosía aumentaba más mi molestia. Pensaba llevar la fiesta en paz para evitar conflictos posteriores (no de parte de él, sino de los demás chinos a los que seguro les pasaría el chisme), sobre todo por acá, que cualquier problema lo tienes que tratar con pincitas por aquello de la “paz internacional”. Sin embargo, la molestia ya me estaba afectando la salud (el dolor y la inflamación del estómago solo por aguantarme y no decirle nada). Pero llegué a mi límite, y buscaba el momento justo para hablar con él: Que no hubiera nadie en el laboratorio, y que fuera más o menos hora de que él regresara a su casa, para que tuviera tiempo de asimilar lo que le diría.
Intenté ayer, pero cuando regresé de cenar él ya no estaba… Así que era hoy o nunca: Antes de regresar a la casa le dije que quería hablar con él y le solté la sopa, en el mejor plan posible: Le mencioné que por qué no iba a ver a un médico porque esa tos no era normal (diario, TODO el día), y que por culpa de esa tos, a veces era difícil concentrarme (aun con los audífonos puestos y escuchando música a un volumen medio… ¡lo tengo al lado! La tos se oye porque se oye), y que le pedía de favor que hiciera algo al respecto. Solo me dijo que entendía y se disculpó.
A ver qué pasa mañana. Por la personalidad del chino y como están las cosas preveo 3 posibles escenarios:
- No se para mañana al laboratorio.
- Va al laboratorio, pero llega otro chino a hablar conmigo (por no decir reclamarme)
- La menos probable: Realmente va a atenderse.
Yo le voy a la opción 1. Quiero aclarar que no le hablé fuerte, ni usé palabras que pudieran ser malinterpretadas (hablé con un japonés formal, teniendo cuidado en cada detalle), así que por ahí no me puede decir nada. Ya veremos.
Lo que sí debo mencionar es que sentí un alivio inmenso después de hacerle saber mi molestia. Soy muy paciente, pero también tengo un límite. Solo espero que con esto que le mencioné hoy la situación cambie y siga la fiesta en paz.