Oh Japón, nunca dejas de sorprenderme.
Aunque ya es noticia vieja, en octubre del año pasado alguien puso a la tierra en subasta. No leyeron mal: la tierra. No lo había comentado por acá, así que me doy a la tarea de hacerlo.
En esta imagen se muestra que la subasta comenzó el 25 de octubre con un precio de 69 yenes, y al momento de sacar la captura de pantalla iba en 3200; había también posibilidad de comprarla directamente al módico precio de 110,721,919 yenes (una verdadera ganga para lo que contiene el “producto”). Sin embargo, la persona que ganó la subasta se retractó, por lo que el “dueño” decidió volverla a subastar, pero esta vez sin opción de compra inmediata.
Aquí ya iba en 53,000 yenes, faltando 6 días para terminar. Hay que notar también que se presenta a la tierra en estado “usado”, y menciona claramente que no se admiten devoluciones.
¿Cómo es que esta persona se hizo dueña de la tierra? ¡Ah! Pues menciona que un buen día se le apareció “dios” en sus sueños y le dijo que la tierra era de suya. Sin embargo, el pobre hombre andada muy necesitado de dinero, por lo que lamentablemente tuvo que tomar la difícil decisión de vender el planeta al mejor postor.
El dueño amablemente respondió a algunas de las preguntas que los posibles compradores le hicieron:
¿No hay ningún problema en la calidad del producto?
R: “Ha sido usada por unos 300 mil millones de años, pero todavía aguanta otros 500 mil millones. Por desgracia, la geografía y el ambiente están cambiando”.
¿Cuánto cuesta el envío hasta Saitama? ¿Se puede usar C.O.D (pagar al recibir)?
R: “El envío no tiene costo, y sí, se puede usar C.O.D.”
¿Es tamaño grande?
R: “No. Es tamaño chico. Todavía hay muchos otros planetas más grandes”.
¿Es posible enviarla hasta Altair?
R:”Gracias por su pregunta. Consulté con el banco, y me dijeron que la confirmación del depósito tomaría unos 17 años luz, por lo que creo que se me olvidaría enviarla. De todas formas, le pido que lo considere, por favor”.
¿Qué hará con el dinero? Si no le molesta la pregunta, me gustaría que la respondiera por favor.
R:”Gracias por su pregunta. Mi sueño es tener casa propia, por lo que usaría el dinero para comprarla.”
Al final de la subasta, la tierra alcanzó el precio de 9,999,999,999 yenes, pero lamentablemente nadie la compró.
Al preguntarle al staff de Yahoo Auctions el porqué de permitir este tipo de encuestas, su respuesta fue que aunque es cierto que están al pendiente para evitar fraudes y por lo general cancelan subastas que parecen sospechosas, este tipo de subastas era, a ojos vistas, falsa, y al mismo tiempo divertida, por lo que decidieron dejarla.
¿Ociosidad? ¿Creatividad? ¿La segunda nació de la primera? Quién sabe, pero de algo pueden estar seguros: se perdieron la oportunidad de ser dueños de la tierra 😛
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Jajaja quizas algún día la tierra deje de ser invaluable, pero por lo pronto da mucha risa ese tipo de subastas. Yo hubiera ofrecido otra cosa invaluable como chicen itzá jeje.
Todavía estás a tiempo de vender Chichen Itzá. Con suerte alguien te la compra 😀