¿Han tenido esa sensación de ansiedad porque no hicieron algo que no habían pensado hacer pero que una vez que no puedes hacerlo se dan cuenta de que en realidad querían?
Sí, sé que está medio enredosa la frase anterior, pero curiosamente así me siento después de despedir a mi amiga hoy por la mañana. Se fue a Australia por 1 año, lo cual me da muchísimo gusto por ella (aunque su inglés ya era muy bueno, va a regresar con inglés como nativa, je). Me siento raro. La nena me dio una tarjeta y una bolsa de dulces, y yo me quedé con la boca abierta (para que una japonesa te de una tarjeta está difícil, en serio), pero en ese momento no se me ocurrió nada. Al regresar a mi departamento, sentí un vacío, y todavía lo sigo sintiendo…
Uno generalmente piensa “un año es mucho tiempo”, pero estando de este lado del mundo, puedo decir que realmente no es nada. Ciertamente suceden muchas cosas, pero el tiempo vuela. Tanto, que ya pronto se cumplirán 2 años desde que salí de México, y en aquel entonces 2 años se me hacían una eternidad.
Aunque estaré en contacto con mi amiga, no la veré en un año. Cuando regrese, quien sabe, no quiero realmente adelantar nada.
En este momento, solo puedo decirle: “¡Buen viaje! Disfruta tu estancia en Australia”.
Por cierto, sí se dejó tomar foto… ¡pero con su cámara! Así que lamentablemente hasta el próximo año podré poner su foto aquí.
PD: Sigue haciendo mucho frío.
Y quien es la susodicha y que paso a final de cuentas.jajajajjajaja