Playa y Pacific Fair – Dia 8

Ultimo dia de la conferencia. Aunque el viernes lo tendre libre, queria variar un poco mis actividades.

Parecia increible que despues de tantos dias y con playas tan impresionantes no hubiera ido ni una sola vez. Decidi levantarme temprano y darme un chapuzon en el mar antes de la conferencia; tomando en cuenta que el sol sale a las 4 am, no fue una tarea tan complicada. 

Despues de poner a lavar la ropa sucia, pase poco mas de una hora en la playa. Regrese, puse a secar la ropa, y viendo que el ciclo iba a durar una eternidad (99 minutos), saque el PSP y a seguir con los juegos.

Fui a la conferencia. Las presentaciones de este dia me interesaban mucho porque eran respecto a mi area: Lenguaje natural. Llegue, las escuche, y me frustre. Opte por escapar.

Por que me frustre? Porque sinceramente al lado de tanta gente con un monton de conocimiento y con trabajos realmente dignos de una conferencia, no me senti en mi lugar. De nuevo volvi a sentir que no he hecho nada, y esta vez es en serio: La gente hablaba de terminos que parece que son normales en el medio, y yo medio apenas comienzo a entender algunos, mientras que otros son totalmente nuevos. Me di cuenta de que tengo que trabajar todavia mas rapido, y que regresando a Japon voy a tener que hacer un cambio drastico en mis actividades.

Hui a Pacific Fair, un centro comercial grandote. Fui mas que nada con la idea de poder retar en Tekken, pero, y como me lo suponia, no habia ni un solo juego de pelea. Segui con mi nutricion australiana de subway, entre un rato al MSN y me encontre a Omar. Ambos dijimos muchas cosas sobre nuestros profesores… cosas no muy buenas.

Pensaba entrar al cine de puro coraje, pero la pelicula que me llamaba la atencion, 1408, casi casi acababa de comenzar. Sin mas por hacer en el lugar, me regrese a escuchar las conferencias sobre aplicaciones de la IA. De nuevo, senti que no estaba en mi lugar.

Me dedique a tomar fotos de los lugares principales de Surfers Paradise, pero me falta tomar desde Q1, el edificio mas alto del lugar. Eso lo hare man~ana en la man~ana.

Por la noche, regrese al hostal y me puse a jugar Silent Hill Origins. Y despues de un par de jefes, por fin lo termine. Fueron 5 horas y media de juego, pero todos sabemos que tiempo efectivo es un poco mas. Ando con el titulo de los Simpson, pero sinceramente da flojera tener que estar repitiendo escenas para poder sacar todo lo que tienen. Ademas, la movilidad confunde algunas veces. Con todo, sigue siendo entretenida la historia.

Man~ana viernes es dia libre. Ya vere que se me ocurre. 

Cena – Dia 7

Dentro de la conferencia se da la opcion de asistir a una cena, pagando claro una cantidad extra. Siendo que ya habia gastado 37,000 yenes en el registro, pagar otro poco no me dolio tanto, pero tenia que desquitarlo.

El segundo dia de conferencias estuvo mas o menos interesante. Me sorprendio mucho el trabajo de una canadiense y una espan~ola, y algunos otros trabajos de aprendizaje maquina. Los de robotica si estuvieron para dejar con la boca abierta a cualquiera. Todo normal, se podria decir.

Dieron las 7 pm y era hora de moverse al 4to. piso. Me junte con el grupo de japoneses que vino desde Hokkaido, y agarrarmos una mesa, lo mas alejado posible del estrado. Habiamos pasado por mucho como para estar cerca de las personas importantes. Despues de unas bebidas y algunos aperitivos, a las 7:30 pm dio comienzo la cena, y cumpli lo prometido: Comi como desquiciado. Pollo, carne de res, cerdo y cordero, verduras, pan. En serio que los del hotel se van a acordar de mi. Claro que no podia falta el postre Laughing

Por la noche, regrese al hostal y estuve jugando un rato con el PSP. El dia habia estado tranquilo en cuanto a movimiento, pero un poco pesado mentalmente. Alrededor de las 11 pm me fui a dormir. 

AI07 – Día 6

El gran día llegó.

Se suponía que tenía que estar a las 9 am en la ceremonia de apertura, pero llegué tarde debido a que me tomé mi tiempo haciendo preparativos. Me levanté antes de las 7 am, me bañé, me cambié, hice todo lo que tenía que hacer, pero nunca me fijé en la hora. Afortunadamente el autobús pasó rápido y llegué a las 9:15 am (mexicano tenía que ser).

Fui testigo de una gran presentación sobre vehículos aéreos inteligentes. Duró 1 hora, pero creo que es de las pocas presentaciones de 1 hora a las que les he puesto verdadera atención. Vaya que tienen buenos resultados, pero evidentemente les falta mucho por recorrer, como ellos mismos lo mencionaron.

Después, a preguntar sobre la sesión de posters. A la 1 pm tenía que estar en el 4to. piso. Entré a algunas conferencias. Algunas interesantes, algunas no tanto, pero en general, todo bien. 

Hora de la comida.

Quería comer rápido para tener mi póster listo y poderme concentrar en las conferencias que faltaban. Buscaba Kebabs (que, como dijo Arnoldo, son excelente fuente de nutrición para backpackers), pero terminé comiendo en "Hungry Jack". Ya pondré una foto del lugar, pero básicamente es el nombre de la franquicia de Burger King en Australia. La nena que me atendió me recordó de nuevo que Japón es el paraíso en lo que servicio al cliente se refiere: Traía cara de que no la habían satisfecho la noche anterior, gritaba para todo y casi aventaba el dinero. Para colmo, mi hamburguesa nomás no salía, y ella solita se dio cuenta. Le pregunté tranquilamente: "Oye, ¿cuánto se tardará?". Y me dijo "No sé". Y es aquí cuando se muestra el fruto de estar viviendo en Japón: Sonríe, ten paciencia y no reclames tan pronto. Eso hice. Mi hamburguesa llegó, la chica me sonrió, se disculpó, me deseó buen día y hasta papas me regaló (yo solo había pedido la hamburguesa). Volví al tradicional rito de comer sentado en algún lugar de la calle, compré una botella de agua, y de regreso a la conferencia.

4to. piso. Estaba los organizadores vueltos locos porque todavía no terminaban de acomodar el lugar. Un chica de Malasia estudiante de la universidad de Auckland (Nueva Zelanda) y yo éramos los únicos que esperábamos. Después de una breve plática y 5 minutos después, ya pudimos poner nuestros pósters en su lugar. Ya solo era cuestión de esperar.

4:30 pm.

La hora había llegado. Sinceramente, después de escuchar las presentaciones, me volví a dar cuenta de que no sé nada, y de que me falta mucho, pero mucho por recorrer. Eso me había puesto mucho más nervioso de lo que ya estaba…

Se anunció el inicio de la sesión, pero antes hubo una mini presentación de un sujeto que no recuerdo su nombre, pero lanzó algunos acertijos lógicos interesantes (que escribiré aquí luego). A las 5 pm, la sesión estaba ya en su punto.

No sé cuántas veces expliqué mi póster, pero fácil fueron 10, y lo más curioso es que tuve la oportunidad de explicar en inglés, japonés, ¡y hasta en español! Una española andaba por ahí, así que me aproveché e hice todo en mi idioma. Sin embargo, fue en el idioma en el que más trabajo me costó explicar todo, quizá porque nunca lo había hecho y mucha de la terminología siempre la manejaba en inglés o en japonés.

No me cuestionaron mucho, hasta eso. Lo malo es que tampoco hubo quien me diera buenas ideas. El japonés, al que le expliqué en japonés, me comentó que él conoce a mucha de la gente que trabaja en procesamiento de lenguaje natural en Japón, y casi está seguro de que nadie ha hecho o está haciendo lo que yo. Me comentó que si tenía éxito me iba a ser millonario, a lo que solo pude responder: "Ojalá".

A espaldas de mi póster estaban 3 chicos de la universidad de Hokkaido, por lo que pude hablar en japonés con ellos. Eso me hizo más llevadera la sesión.

Todo terminó sin problemas. Y en cuanto estuve fuera del hotel, me vine a escribir lo que tenía pendiente, si no, me pasa lo que al autor, o por mencionar a alguien más cercano, a Omar.

7:48 pm. No alcanzo la BBQ del hostal… ¡pero no importa! Lo más pesado pasó. Comenzaré a trabajar duro en cuanto regrese a Japón, pero mientras tanto… ¡A disfrutar Australia! 

Sea World – Día 5

Lunes, día libre. Un día antes de la presentación. Tenía que aprovecharlo. Considerando que el hostal está a tan solo 10 minutos (caminando) de Sea World, me sacrifiqué y fui.

La entrada no es nada barata: 66 AUD. De hecho, llegué a las 10:45 am y solo traía 80 AUD en la bolsa. Sabía que tenía que comer dentro del lugar, por lo que 20 AUD no era buena señal, así que me regresé al hostal, y 20 minutos después estaba de nuevo en la entrada de Sea World, ya con un poco más dinero (lo esencial para comer). Una vez dentro hice mi plan y me fui a ver un show de focas, algunas atracciones, recorrer el parque caminando, comer, ver más shows, subirme al teleférico y al monorriel y comprar un recuerdo.

Les diré: El lugar está bonito y los espectáculos son entretenidos, pero no creo que valga los 66 AUD. El horario es de 9 a 5. Yo entré a las 11 am, y aun con las esperas en las atracciones más populares, para las 3 ya había visto todo lo que había que verse y hasta comprado mi recuerdo. Ya pondré fotos.

Llegué al hostal, y como era temprano, decidí ir al centro de nuevo (y usar el pase de una semana que compré para el autobús). Ahí fui primero a una atracción llamada "Infinity", y es otra onda: Es un laberinto de espejos, pero todo oscuro, solo un juego de luces que crean ambientes, a veces extraños, a veces muy llamativos. Lo único que tienes para guiarte son los guantes y los calcetines que te dan, ya que brillan en la oscuridad. Por ejemplo, lo primero que tienes que hacer es encontrar la salida en un setting de una tarjeta madre de una computadora, y les quedó muy bien. En verdad sientes lo que es un electrón. Después, hay algunos cuartos interesantes, un puente que, supuestamente, cruza un abismo sin fondo (creado con el reflejo simultáneo de 2 espejos), y la típica foto del recuerdo.

De ahí, me fui a Minus 5°, un bar en donde todo está hecho de hielo: Asientos, paredes, estatuas, la barra y hasta los vasos en los que tomas. Está caro (30 AUD por 30 minutos, 1 bebida incluída), y también es pequeño, pero si vas en bola puede ser un lugar divertido para pasar el rato. Ahí, hablé con el bartender, y como era también estudiante universitario, fue fácil entablar conversación. Por supuesto que le pregunté dónde había Tekken, y me dijo de un lugar, al que después fui y sí, en efecto, estaba Tekken… 4. Sin palabras.

Los lunes en el hostal son "noches de películas". Rápidamente regresé y llegué a tiempo para ver… "El código da Vinci". Bueno, sin nada que hacer, y para ahorrar dinero, fue una buena opción.

Terminando la película me directamente a dormir. El martes era el gran día, así que tenía que estar despierto a tiempo. 

Surfers Paradise – Día 4

Si me preguntaran en dónde quiero pasar las siguientes vacaciones que tenga, o cuál es la playa que más me gusta, sin lugar a dudas respondería: ¡Surfers Paradise, Gold Coast, Australia!

Este lugar es simplemente increíble: La playa es enorme, y créanme cuando digo enorme. A donde voltees, solo ves playa y más playa, sea para la izquierda o para la derecha. Las olas enormes, perfectas para quienes quieren surfear, el clima no puede ser mejor, las chicas en bikini y algunas en topless tomando sol. Y fuera del mar, las tiendas, centros comerciales, bares, antros, night clubs, parques de diversiones, tours, etc., hacen de este lugar algo mágico. Insisto: Jamás he ido a Cancún, así que no me digan malinchista (a lo mejor Cancún está más chido).

Así como andaba (todo sudado, sin peinar, con short y el jersey de la selección de México) me fui al Holiday Inn para ver qué onda con las actividades de la conferencia, y cuál va siendo mi sorpresa que ya estaban registrando gente a esa hora. Sin otro remedio, me formé y así me registré. Me dieron una mochila con todo lo que necesitaría para la conferencia, incluído el valiosísimo libro de los "Proceedings" de la conferencia, es decir, un libro que contiene todos los papers que fueron aceptados. Eso es lo que me cuentan en la universidad. Acto seguido, me fui al hostal.

Después de hacer el checkin, bañarme y cambiarme, era hora de conocer los alrededores. Ya había caminado mucho ese día, así que decidí subirme a un autobús. Los amables choferes tuvieron el poder de recordarme a mi adorado México: Manejan como locos. Eso sí: Respetan las paradas y sí son amables con la gente, pero nomás arrancan y parece que van jugando carreras. En fin, para no andar sacando dinero a cada rato, y considerando que el hostal está lejos del centro, y por ende lejos del lugar de la conferencia (Holiday Inn Surfers Paradise), decidí comprar un boleto por una semana, que da acceso a todos los autobuses de la ciudad. Me costó 42 AUD, pero los vale. Me subí al autobús, y de regreso al centro.

Básicamente ese día la pasé solo recorriendo toda la zona principal de la ciudad. Pensaba agarrar un tour de esos de medio día, pero estaba tan cansado que mejor opté por irme al hostal, jugar con el PSP un rato y quedarme dormido. Las actividades de la conferencia comenzaban hasta el martes, así que el lunes tenía que disfrutarlo de alguna forma, y creo que lo hice. Pero eso va en otra entrada.

Por cierto: Ningún koala ni tampoco ningún canguro todavía. A ver si voy al zoológico el viernes. Ahí le tomaré foto a uno especialmente para Guolquen 😀

Omar: Escribo esto desde cafés internet que me encuentro. El promedio son 3 AUD por hora, y son SÚPER ADSL (extraño la conexión de mi casa). 

De Sydney a Gold Coast – Dia 3

El checkout del hotel era a las 10 am, y el tren salía a las 4:20 pm. O sea que tenía mucho tiempo que perder. La idea era ver Beowulf en Imax 3D, pero la función comenzaba hasta las 2:30 pm, así que la idea quedó descartada. Me fui al acuario de Sydney, donde, de nuevo, valió la pena ser estudiante: De 28.90 AUD pagué solo 18, y el lugar sí los vale. Creo que, junto con el de Okinawa, es el mejor acuario que he visto.

Sí había Nemos, pero no les tomé foto. Solo tomé unas cuantas con el celular, especialmente de los "Platypus" (ornitorrincos). En general la pasé bien y perdí como hora y media bobeando ahí adentro. Lo que nunca supe, hasta que salí de Sydney, fue que al lado hay como un parque de vida salvaje. Ni modo, me lo perdí.

De ahí me fui a las máquinas otro rato. Salió mejor reta que el día anterior, pero de todas formas el entrenamiento con los nipones en Tekken ha dado resultado.

Regresé al hostal por mis maletas, estuve una hora sentado sin hacer nada, y cuando dieron las 3:10 pm, fue hora de decir adios definitivo a Sydney.

La estación está cerca de donde me quedé, y como tenía todo reservado y pagado, fue nada más llegar a revisión y volver a esperar. Y déjenme decirles que la maldición de los niños en el avión también se extendió al tren: 4 me tocaron alrededor. Lo bueno fue que ninguno a mi lado, si no, habría terminado jugando a "Kick the baby!" con él.

Hasta ese momento, el lugar a mi lado estaba solo (me tocó ventana), y rogaba porque me tocara un buen acompañante, de ser posible una chica. Y antes de que piensen mal, no, no para ligarla, simplemente es bien sabido que me desenvuelvo mejor con las féminas. Creía que me lo merecía ya: Entraron como 5 "aussies" que estaban muy bien… pero no se sentaron al lado. El tren arrancó. Pensé: "Mejor solo que mal acompañado, así tengo 2 lugares para mí", pero ¡oh no! El chiste era complicarme el trayecto de 14 horas que me esperaba, y a la siguiente estación se subió una señora de unos 55 años, con una bandana en la cabeza visiblemente cubriendo el hecho de que estaba perdiendo el cabello, y por más que pedí "¡al lado no! ¡al lado no!", ¿a que no adivinan cuál era su asiento?

Hasta eso, no discrimino gente y comencé a platicar con ella… lo cual fue un grave error, porque la "ñora" me sacó la historia de su enfermedad, de por qué se divorció de su esposo y de que estaban intentando volver a estar juntos, y hasta el porqué es discriminada solo por usar una bandana. La señora, hasta eso, era dulce, pero quería ser el centro de atención durante todo el camino, y no había forma de cortarle la plática, y si toman en cuenta de que ya traía el PSP colgado al cuello listo para proyectar Resident Evil Extinction, pues la ansiedad era mucha, pero me la aguantaba. Cuando la señora se levantó al baño, aproveché para hacer lo mismo, terminé más rápido que ella y regresé a mi asiento a comenzar a ver la película. El plan tuvo éxito, pero aquí entró el segundo problema con la "ñora": Su tamaño. En serio: No me molesta que alguien esté gordo, pero si a leguas ves que no cabes en un asiento, compra otro para ti. Dejar a la señora en el lado del pasillo fue el peor error que pude cometer en el viaje puesto que se durmió, y no había forma de brincarla, pasar por debajo o aventarla fuera del asiento para poder pasar; y lo peor: Cada que se movía el tren, la señora, dormida, temblaba, exclamando un grito de susto. Y, con todo respeto para ella y para todas las personas obesas que leen este blog: Dormía como vaca. Se movía de lado a lado, y como no cabía en su asiento, pues a mí me tocaban los golpes, las encimadas y demás. La "ñora", para que se den una idea, casi perdía el aliento por ir por un café (caminar a lo mucho 20 pasos). Regresaba respirando muy agitadamente, como si acabara de tener una sesión maratónica de sexo después de 20 años de inactividad. Tan así era que tuvieron que darle nebulizadores para que pudiera respirar.

"Afortunadamente", la "ñora" se bajó del tren como 3 horas antes que yo, lo cual me dió las pocas 2 horas de sueño que he tenido este día.

Pero eso no fue todo: Al llegar a Brisbane, tenía que cambiarme de tren para Gold Coast. Así lo hice, pagando los 10.10 AUD respectivos, y al estar esperando en la plataforma, me dio sed. Fui a la máquina de refrescos, metí 2.20 para comprar una botella de agua y nada: Ni botella, ni me regresó el dinero, y tuve el tino exacto para comenzar a comprar cuando el tren había llegado. Ni modo. Es más: Ni al baño pude entrar.

Ignoraba cuánto tiempo haría hasta Surfers Paradise (mi destino final), por lo que no podía dormir nada. La travesía en tren duró 1 hora y 5 minutos, y después hay que cambiarse a un autobús, en donde toma otros 25 minutos. Hasta que me bajé en la última estación fue cuando pude responder al llamado de la naturaleza, y, sin darme cuenta, estaba a unos metros de la playa más chida que haya visto en mi vida (no he ido a Cancún, para que no digan que soy malinchista). Pero lo malo todavía no acababa: Pensé que el hostal estaría cerca… ¡AJÁ! 45 minutos caminando del lugar de la conferencia hasta donde me voy a quedar las próximas 6 noches.

Llegué muerto, pero lo mejor: El checkin es hasta la 1. Estoy perdiendo tiempo.

Fotos, ya que regrese a Japón.

Manly – Dia 2

El segundo dia fue algo asi como el espacio cultural. Tenia planeado ir a las Blue Mountains, pero como me levante tarde, no me ajusto el tiempo, asi que decidi hacer lo primero que encontrara.

Justo cuando termine el post pasado, la recepcion del hostal anuncio un tour en barco a un pequen~a isla cerca de Sydney, tentenpies gratis e historias y presentaciones sobre los aborigenes. Ni tardo ni perezoso acepte (25 AUD), y salimos casi inmediatamente.

El tour estuvo mas informativo que otra cosa. El barco estaba decente (un bote con capacidad para unas 15-20 personas), y si tomamos en cuenta que los unicos en el tour eramos 5 huespedes del mismo hostal (los otros 4 eran de Inglaterra), pues fue atencion 100% personalizada. Durante el trayecto nos contaron historias de lo que ibamos viendo (edificios, islas, etc.), y al final llegamos a una pequen~a isla, donde las historias continuaron (algunas muy interesantes). Acto seguido, caminamos por toda la isla (5 minutos, no es broma), y despues hubo una presentacion sobre los aborigenes: Un hombre se vistio como es natural en su tribu, conto mas historias, y toco un poco el digeridoo.  

De regreso nos dejeron en el muelle, cerca de la Opera House. El grupo se separo (cada quien por su lado), y aproveche para tomar un ferry hacia Manly, un suburbio de North Sydney. El ferry hizo 30 minutos, y al llegar, hice la tipica caminata por el lugar.

La historia del lugar la pueden leer en cualquier lado, por eso no profundizo en ella aqui. Sin embargo, he de mencionar que el lugar es muy pintoresco. Tome algunas fotos de edificios, la playa principal y las vistas que ofrecian los miradores. Por cierto, mi comida fue un Subway de atun. 

De regreso en Circular Quay, tome el tren hacia la estacion central para regresar al hostal. Lave la ropa sucia y me fui a jugar Tekken a las arcadias cercanas. Vaya que me han entrenado los japoneses: Gaste solo 2 AUD (2 juegos) y me fui 6 y 9 wins respectivamente. Xiaoyu demostro su poder en "Down Under".

Pero, sin duda, lo mejor del dia fue lo ultimo que hice: Me comi un kebab de pollo con una fanta de naranja… sentado en la banqueta… a media noche. A lo mejor no suena tan llamativo, pero senti una paz interior indescriptible, quiza porque en Japon no lo habria disfrtutado tanto (se puede hacer, pero en donde vivo no hay lugares asi que esten abiertos a media noche).

Me dispongo a hacer checkout. El tren hacia Brisbane sale a las 4:20 pm, asi que tengo como 5 horas libres, las cuales aprovechare en el mercado que hay cerca y en el acuario de Sydney.

Fotos hay muchas, pero no las puedo subir aqui. Sean pacientes por favor.

Por lo pronto: Adios Sydney. Quien sabe cuando vuelva por aca. 

Manly

Sydney – Dia 1

Como las maquinas estan llenas y hay que aprovechar el tiempo, escribo desde el celular. El primer dia estuvo tranquilo. Llegue al hostal a las 10:30, pero el checkin era hasta las 12, asi que me la pase jugando titulos de NES en el PSP. Una vez que me dieron cuarto, escribi el post pasado, me ban~e y me dispuse a explorar. Recorri toda la calle principal de Sydney: George street. Muchas tiendas, muchos carros, mucha gente. Llegue a Circular Quay, de donde salen muchos ferris hacia North Sydney, y al fondo, majestousa, la Opera House. Me gustaria poner foto (aqui tengo un par en el tel.), pero no se como cubirlas al servidor desde aqui. 4 horas caminando, una Baskin Robbins de fresa y un intento de burrito mexicano con una fanta de naranja fueron los resultados. Por la noche simplemente camine un rato, regrese al hostal, jugue un pcoc con el PSP y cai muerto. Hoy ya es tarde, pero me siento muy relajado y me la pienso tomar muy tranquila. Aqui sigo… Opera House, Sydney

Desde Sydney

Ni tiempo tuve de escribir antes de partir de Japon. Las cosas se complicaron mucho debido a un virus que quien sabe por que me cayo. Intente arreglarlo hasta el ultimo momento, pero la maquina continuaba enviando correos a lo loco, por lo que decidi hacer las ultimas actividades desde Linux, pero ni siquiera Linux leia el disco de Windows. Fue un desastre, pero a fin de cuentas saque la informacion que necesitaba.

Los vuelos (Fukuoka-Haneda y Narita-Sydney) estuvieron tranquilos, y sigue la "maldicion" de que en los aviones siempre me toca estar cerca de alguien que lleva bebe. Ya sabran lo "mucho" que dormi.

En fin. Llegue a Sydney sin problemas. La mochila y el poster si los pude llevar dentro del avion. Sinceramente, pense que no me dejarian meter la mochila porque se veia grande y ademas esta pesada, pero no me dijeron nada. Realmente me ayudo no tener mas equipaje, es decir, 100% mochilazo puro.

Hace calor por aca (debe de, es verano). Saliendo del aeropuerto tenia la posibilidad de llegar al hostal en un shuttle (12 AUD), pero decidi mejor experimentar y me fui en tren. Ser estudiante ayuda: En vez de pagar 14 AUD por el pasaje hasta la estacion central solo tuve que pagar 9.60.  Despues, unos minutos buscando el lugar et voila! Llegue a mi primer destino.

Practicamente me acabo de instalar. No he tomado fotos. Me dispongo a tomar un ban~o, comer algo, y comenzar el tour.

Espero tener tiempo (y dinero) para subir, de menos, las fotos que considere mas ilustrativas de por aca.