Muchos cambios se han dado en las últimas semanas, y muchos seguirán dándose.
Primero, ya estoy en mi segundo año de doctorado, y sinceramente, eso es lo que más me preocupa. A como han ocurrido las cosas, tengo una presión enorme porque no sé si alcanzaré a terminar a tiempo. Por esa causa, no disfruto realmente nada últimamente: Ni salidas, ni juegos, ni programación, ni televisión, y he andado de un humor tan malo que cualquier cosa hace que me irrite casi al instante. Lo noto y trato de controlarme, pero el hecho de tener a un profesor que no te pela y que está a punto de retirarse y a como otros 3 profesores detrás de ti diciéndote que ya no te queda tiempo cada vez que te ven, hacen que ese control se pierda.
Perdí mi tarjeta de Tekken. Sinceramente, más que enojarme, me ayudó a volverme a dar cuenta de que no es tan malo comenzar de nuevo. He tenido un poco de paciencia al respecto, y en 3 días subí a Xiaoyu a 3er. dan, aunque me volvieron a bajar a segundo porque de plano no he ganado ninguna las últimas. y contadas, veces que he ido.
Cambié mi carro. El otro todavía funcionaba y le quedaban 2 meses antes de la verificación, pero si contamos que era un carro de hace más de 15 años, los detallitos ahí estaban y el costo de la verificación se iba a disparar, por lo que opté por sacar mis ahorros y comprar un carro más nuevo. Luego subo fotos.
Emi recibió una oferta de trabajo como profesora de tiempo completo en una secundaria. Era lo que ella había estado esperando, pero a menos de 1 mes de haber comenzado, su ritmo de vida está increíblemente acelerado, y cada que nos vemos se la pasa durmiendo de tan cansada que termina. Ella misma dice que no cree poder aguantar otro año así (y apenas van 3 semanas), pero siendo algo que ella misma escogió, siempre le digo que no hay de otra y que, al menos este año, le eche ganas y que evalúe si quiere seguir así o no, ya que, aunque recibirá el famoso “bonus” (algo así como el aguinaldo en México), el ritmo de trabajo es muy pesado.
Estoy por comprar una computadora nueva para el laboratorio. Es inaudito que, habiendo tantas computadoras aquí, no le puedan asignar una máquina a cada persona. El punto es que, aun cuando los directorios home en Linux usan NFS, instalar algo local cada vez que cambias de máquina es pesado, más cuando no tienes suficiente tiempo. Y ni se diga de Windows: Todo local. O sea que no tiene caso ponerte a trabajar en una computadora si al día siguiente llegas y alguien ya la está usando. Eso, y el hecho de que mi laptop está cercana a cumplir los 4 años de vida (y aún sigue dando batalla), me han puesto a pensar en comprar una nueva desktop para tenerla en el laboratorio. Eso sí: No tan “marrana” como la desktop de la casa (a ésa sí le invertí un buen), sino algo relativamente poderoso pero simple, solo para desarrollar. La laptop la pienso dedicar a lo mismo: Linux y desarrollo en ese ambiente, ya que en este sistema operativo no se alenta para nada.
Tengo además un proyecto de un juego nuevo para PSP. No quiero revelar detalles, solo que es un juego conocido que me dieron ganas de hacer por mi cuenta tanto para tener algo más que escribir en el currículum, como para no olvidarme de C++ y para aprender un poco de arquitectura del procesador MIPS. Lo malo es que no he tenido tiempo para ponerme a codificar los primeros pasos, aunque en papel sí he avanzado unas cuantas funciones.
Necesito vacaciones, indudablemente, pero no solo de no venir al laboratorio y de salir algún lado, sino también mentales, es decir, poder olvidarme por completo de la investigación al menos unos 3 días. El problema es que con los tiempos que traigo, nomás no veo cómo poder tomar 3 días, menos cuando todavía hasta la semana pasada prácticamente dormí todos los días en el laboratorio por querer terminar un artículo que, hasta la fecha, sigue dándome lata.
El programa de radio, como se habrán dado cuenta, lo tengo en descanso hasta nuevo aviso. Algunos dirán que son solo 2 horas de mi tiempo, pero ni siquiera de esas 2 horas dispongo ahora, ni siquiera para poder jugar los títulos que compré para PSP, PS2 o Wii, y que, así como los compré, así están guardados esperando a que me pueda desocupar un poco. Es más: Lost lo tengo que ver en 2 o 3 partes porque lo pongo antes de dormir y siempre me quedo dormido antes de que termine. Voy al día, cierto, pero es como si estuviera viendo 10 minutos diarios.
Gracias a Omar, un día de estos comenzaré a hacer pruebas con WordPress y la migración de este blog a él. Ya está instalado, pero falta mover todo lo de aquí para allá, y eso llevará algo de tiempo, aunque con lo que Omar le hizo a su blog, buena parte de ese tiempo ya está ahorrada. Me da gusto que al menos mis conocidos se estén divirtiendo.
Sigo aquí, pero necesito que los días tengan como 40 horas mínimo para poder hacer todo lo que debo y quiero hacer.